El kit de arrastre es una de las partes de la motocicleta que se somete a un trabajo constante, lo cual conlleva desgaste y fricción. Por esta razón, es importante no descuidar el mantenimiento de esta área de la moto. Mantener una lubricación adecuada, una limpieza regular y un correcto ajuste de la cadena son garantía de un funcionamiento óptimo y contribuyen a prolongar la vida útil de cada uno de estos componentes.
En la actualidad, las fábricas de motos emplean diversos sistemas de transmisión en sus diseños. Sin embargo, es importante comprender qué es un kit de arrastre para determinar si nuestra moto requiere reparación o reemplazo de alguno de estos componentes.
Este kit, conocido también como kit de transmisión entre muchos motociclistas, consta de tres componentes fundamentales que se encargan de transferir la potencia del motor a la rueda trasera de la moto: la cadena, los piñones y la corona.
La cadena, al estar conectada a los piñones de la caja de cambios, transmite el movimiento inicial a la corona ubicada en la rueda trasera, permitiendo así poner en movimiento la motocicleta.
La cadena. Es responsable de transmitir la potencia desde la caja de cambios y debe estar correctamente lubricada y tensada para evitar que se suelte y garantizar un funcionamiento suave.
Los piñones. Son piezas ubicadas en la caja de cambios que cuentan con diferentes tamaños. Los más pequeños están conectados al eje del motor, mientras que el más grande se encuentra en la rueda trasera. Esta diferencia de tamaños permite ajustar la relación entre la transmisión, la velocidad y la potencia del motor según los requisitos de cada situación.
La corona. Este componente se encuentra en la rueda trasera y se conecta a la cadena. Su tamaño también influye en la relación de transmisión. Para garantizar un excelente agarre y prevenir deslizamientos, es fundamental que se encuentre en condiciones óptimas.
Fuente: Motociclismo