El incesante mercado chino está sufriendo una revolución de cabo a rabo en toda su estructura productiva y mentalidad. Cuando hace unos años empezaron a florecer los primeros grupos nadie parecía tomarse enserio sus pretensiones, hasta que vimos las primeras máquinas llegar a Europa, incluso a España.
Kove es una de esas marcas chinas que en 2023 llegará precisamente a Europa (y España) y que en China está dejando un buen legado. No hay más que ver a una de sus últimas creaciones, la Kove 400 RR, una tetracilíndrica de 400 cc que revive el espíritu de los cuatro cilindros en las motos de media cilindrada y que da casi 70 CV.
Sobre el papel parece una moto con cierto tono picante. Los más escépticos dirán que es una marca china la que se ha preocupado de actualizar una máquina tetracilíndrica con 400 cc como las de antaño, y lo cierto es que en cierto modo es así. Kove (antes Colove) adelanta por la derecha a Kawasaki, que preveía sacar la ZX-4R próximamente.
La moto en sí dispone de un diseño bastante agresivo. Unas líneas que poco o nada tienen que envidiar a ninguna R italiana o japonesa, fuentes de las que parece beber su inspiración, incluso con deflectores y alerones en el frontal del carenado, portamatrículas largo, un discreto y compacto escape y un doble faro LED separado por una toma de aire.
Lo que guarda bajo el carenado tampoco es cosa menor: un motor tetracilíndrico en línea con 16 válvulas de 400 cc por refrigeración líquida, configuración DOHC y 67 CV a 13.500 rpm, con un par motor de 36 Nm a 12.000 rpm. La cuestión que más susceptibilidad puede provocar es la fiabilidad del motor a largo plazo.
Los datos que ese motor dejan no son para nada desdeñables: de 0 100 km/h en 4,2 segundos, siendo capaz de alcanzar los 220 km/h de velocidad máxima y un peso de solo 152 kg en orden de marcha. Desde luego que sus datos recuerdan inmediatamente a la mítica Kawasaki ZXR 400.
En la parte ciclo destacan la horquilla invertida, con monoamortiguador en el tren trasero y una frenada con doble disco delantero y uno trasero de J.Juan, todo ello encuadrado sobre un chasis multitubular de acero con un basculante tipo banana. El cómo suena tampoco deja poco a la imaginación, porque en la presentación de la moto, la marca ha publicado un vídeo en el que se deja escuchar ese tetracilíndrico (aunque, ¿parece sonar un turbo?).
Por otra parte, esta moto será exclusiva para el mercado asiático, concretamente el chino. No llegará a Europa, al menos de momento. Ni siquiera se sabe si cumple con la normativa Euro5, pues en China no es pareja la normativa medioambiental. Quien sí llegará es la marca en sí, que aterrizará en toda Europa con algunos modelos limitados como la Adventure 800X
Fuente: motorpasionmoto.com