Fundada en 1891, Royal Enfield ha perdurado más de un siglo y hoy está presente en Argentina, Colombia, Ecuador y Perú.
De todas las marcas de motos que coparon la industria motor inglesa desde las últimas décadas de 1800, sólo una ha permanecido en funcionamiento por más de 100 años: ROYAL ENFIELD. Comenzando su historia en Ridditch Inglaterra en 1891, siendo su fuerte la fabricación de bicicletas, repuestos para máquinas de coser y piezas para rifles nace Royal Enfield. Tomando el nombre “Royal” de uno de sus clientes y el nombre “Enfield” de la localidad de uno de
éstos.
Hacia 1899 lanzan los primeros vehículos con motor siendo estos un triciclo y un cuatriciclo. De ahí en más nacen las motos y su evolución no se detuvo.
Fueron pioneros en mecánica y lideraban las ventas hacia 1915. Llega la Primera Guerra Mundial y con ella la producción de Royal Enfield recae sobre el ejército. No se desarrollan nuevos modelos hasta entrada la década del ’30, cuando la reconocida Bullet ve la luz por primera vez. Las Bullet fueron de 250cc, 350cc y 500cc dando resultados excelentes en diferentes momentos, que hicieron que su nombre esté presente en la actualidad.
Hacia 1949 nace la Bullet 350cc monocilíndrico, una de las primeras con suspensión trasera que fue estrella entre las motos de trial. La 5oocc tuvo también la posibilidad de cosechar varios títulos. A mediados de la década del 50, el gobierno de la India comienza a hacer cuantiosos pedidos, lo que lleva a la fábrica de Ridditch a buscar un socio en aquél país.
Comenzaron ensamblando las motos en India, pero poco tiempo después se abre la fábrica en Chennai. En 1962 la compañía de Inglaterra se vende y la producción continúa desde India.
Y así es como luego de más de 125 años ininterrumpidos Royal Enfield ha sabido mantenerse, basando su receta en desarrollo tecnológico, buenas ideas y mucho, mucho estilo clásico bien conservado. En Latinoamérica la marca se encuentra en Argentina, Colombia, Ecuador y Perú.