En los últimos tiempos, las carreteras han experimentado una proliferación notable de autocaravanas y campers. Aunque la noción de llevar consigo la comodidad del hogar ha existido desde hace mucho, ahora vemos un aumento significativo desde la llegada de la pandemia. Sin embargo, este auge siempre estuvo centrado en vehículos de cuatro ruedas. Entonces, ¿por qué no considerar la posibilidad de una autocaravana sobre dos ruedas?
Revzilla se enfrentó a este desafío con ingenio y humor al emprender un viaje por la Ruta 66 en motocicletas que también servirían como alojamiento. Es cierto que, al reflexionar, no se suele incluir la capacidad de dormir en una moto en la lista de sus muchas ventajas.
Es en este punto donde Zack y Ari decidieron asumir el reto. Con un presupuesto compartido de 2500 dólares, abordaron la tarea de construir una motocicleta con alojamiento y otra con un remolque. Sus enfoques fueron notoriamente diferentes. La interpretación más llamativa fue la de Zack, quien transformó una Honda Gold Wing en una suerte de motocicleta autocaravana. Su cabina de descanso estaba permanentemente unida a la moto, similar a un gran compartimento de pizza.
Dentro de esta “Wing-Ebago”, como la denominaron, se encuentra una extensión que le permite a Zack entrar y dormir. Dado que la moto no puede mantenerse estable en reposo con una persona encima, se incorporaron gatos estabilizadores para mantenerla equilibrada.
Indudablemente, esta Wing-Ebago es una creación brillante, aunque en el fondo del desafío se encuentre una dosis de locura. Sin embargo, es relevante señalar que cargar algo así afecta negativamente la conducción, como lo evidencian las ocasiones en que Zack terminó en el suelo debido a volcaduras.
En contraste, Ari adoptó un enfoque más pragmático y efectivo. Optó por una veterana GSX-R1000 del 2006 y le acopló un remolque con tienda de campaña. Aunque esto puede no sonar tan impactante, al observar el video, resulta evidente que esta opción es más práctica y cómoda.
La Wing-Ebago podría atraer más la atención, pero en términos de funcionalidad, la Gixxer con el remolque se muestra como la elección más práctica. Cabe mencionar que, además de la adquisición del remolque, se llevaron a cabo diversas modificaciones en la motocicleta para lograr que todo funcione correctamente. Quizás la única falla fue el tema del baño, que no quedó completamente resuelto y terminó volando en las primeras etapas. Bromas aparte, en vista de las dificultades para encontrar alojamiento en vacaciones, la idea de una motocicleta autocaravana podría ser tentadora, si no fuera por la ilegalidad en España y la complicada homologación.
Es importante recordar que en el país ibérico, las motocicletas pueden llevar remolques bajo ciertas restricciones, como no circular de noche ni en condiciones de baja visibilidad. Por lo tanto, la opción de agregar un remolque a una motocicleta es legal, aunque manejar una moto con remolque sea un desafío en sí mismo.
Fuente: Soy Motero