Estos modelos son objeto del deseo de aquellos motociclistas que buscan la superexclusividad y el exceso como símbolo de estatus
A menudo vemos en los medios a multimillonarios deportistas o a riquísimos raperos mostrando orgullosos el último modelo de superdeportivo que acaban de adquirir. Automóviles con cinco y hasta seis ceros en el precio, verdaderas piezas de museo que la mayoría de las veces no pisarán jamás la calle porque su lugar está en una colección privada.
No obstante, esto no es algo exclusivo de las cuatro ruedas. También en el mundo de la moto ocurre algo similar y se construyen máquinas súper exclusivas al alcance solamente de unos pocos privilegiados con cuentas corrientes muy abultadas. Prácticamente todas ellas son preparaciones artesanales a partir de modelos de serie ya de por sí también de alta gama y el resultado final en muchas ocasiones roza lo extravagante. Eso sí, sus prestaciones son tan impresionantes como sus precios.
Neiman Marcus Fighter Limited Edition
11.000.000 dólares
Neiman Marcus es una importante cadena de grandes almacenes en Estados Unidos especializada en clientela de lujo fundada en 1907 por Carrie y Herbert Marcus Neiman. Es propietaria, entre otras, del mítico establecimiento Bergdorf Goodman en Manhattan.
En 2008 sus actuales propietarios, apasionados de las dos ruedas, quisieron promocionar el negocio subastando entre sus clientes más pudientes la que debía ser “la moto más exclusiva del mundo”. Le encargaron el trabajo a Confederate, uno de los preparadores más prestigiosos del país y el resultado es la Fighter L.E. Solamente se construyeron 45 unidades y su precio de salida era de 110.000 dólares hasta que un comprador anónimo pagó por la última de ellas nada más y nada menos que 11 millones de dólares.
A la Neiman Marcus le da vida un motor V-Twin a 45º de 1.996 cc refrigerado por aire que entrega 120 CV de potencia y 183 Nm de par. Su chasis está fabricado con titanio, aluminio y fibra de carbono de origen aerospacial y puede alcanzar los 305 km/h.
AJS Porcupine E90
7.000.000 dólares
El caso de la segunda moto más cara de esta lista es completamente diferente al de la anterior. En 1949 y pilotada por Les Graham, la AJS “Puerco Espín” -eso significa su nombre, por la peculiar forma de las aletas de refrigeración del motor- fue la primera moto de la historia en ganar una carrera del Campeonato de Mundo de 500 cc. De hecho, a día de hoy, sigue siendo la única moto de 2 cilindros que ha ganado el título mundial del medio litro.
Sólo se construyeron 4 unidades, totalmente realizadas a mano. En 1954 se suponía que todas ellas habían sido enviadas a la prensa hidráulica al considerarse obsoletas por lo que se las daba completamente por perdidas.
Sin embargo, casi dos décadas más tarde se descubrió que había sobrevivido una unidad, cuyo precio final alcanzó en una subasta organizada por Bonhams la friolera de 7 millones de dólares, que fueron pagados por un propietario anónimo. Es por tanto la única AJS E90 que queda en el mundo, una auténtica pieza de museo y un verdadero trozo de historia del motociclismo, aunque algo caro.
Ecosse ES1 Spirit
3.600.000 dólares
Realizada por completo en titanio aeroespacial, con 120 kilos de peso, motor tetracilíndrico de 1000 cc y 210 CV, la Ecosse supera los 386 km/h de velocidad máxima, suponiendo que alguno de sus propietarios quiera arriesgarse a sacarla del garaje y rodar con ella en circuito. De hecho, la moto es tan potente que antes de adquirir una, la compañía obliga a los compradores a realizar un curso de pilotaje de dos semanas en sus propias instalaciones en el circuito de Laguna Seca.
Ecosse Moto Works Inc. fue fundada en 2001 por Donald Atchinson en Denver -Colorado- y se dedica únicamente a la fabricación de motos superexclusivas con la más alta tecnología.
Únicamente existen 10 unidades; todas son artesanales y todas adaptadas a las preferencias de cada comprador, por lo que no existen dos Ecosse iguales. La S1 Spirit fue diseñada en 2007 por Dick Glover -anteriormente fue ingeniero del equipo McLaren de F1- con un único objetivo: hacer la moto deportiva más ligera y rápida del mundo. Su eficiencia aerodinámica dobla la de cualquier otra motocicleta de altas prestaciones, incluidas las máquinas de MotoGP.
The Yamaha “Nehmesis” BMS Chopper
3.000.000 dólares
Probablemente estamos no solamente ante una de las motos más caras del mundo sino también ante la más excéntrica. La Nehmesis ha sido diseñada por Sam Nehme con la inspiración estética de Gianni Versace. Fue transformada totalmente a mano en el taller de preparaciones BMS Chopper de Fort Lauderdale sobre la base de una Yamaha Road Star 1700; tiene 3,5 metros de longitud y su rueda trasera mide 36 centímetros de ancho. Y otro “pequeño” detalle que explica su precio: toda su carrocería está realizada en oro de 24 quilates y aluminio de aviación.
Su autor trabajó en ella completamente durante seis meses a razón de 18 horas diarias y calculó que solamente en mano de obra la moto superaba los 250.000 dólares. Para no recurrir a amortiguadores que afearan la parte trasera, la moto lleva suspensión neumática capaz de variar su altura al suelo nada más y nada menos que 25 cm incluso en plena marcha.
Todos los dibujos han sido aerografiados a mano por el diseñador y el asiento está forrado por el mismo terciopelo que se suministra a la casa real británica. La moto funciona y es capaz de rodar legalmente; de hecho, así lo ha hecho a título de exhibición en algún evento pero el propio Nehme reconoce que no es cómoda y que su destino más probable es acabar en alguna colección privada.
Harley-Davidson Cosmic Starship
1.300.000 dólares
La razón por la cual esta Harley-Davidson V-Rod del 2009 superó casi de inmediato la barrera del millón de dólares en una subasta se debe a que, en realidad, se cotizó a precio de obra de arte.
Fue pintada a mano en 2012 por el artista Jack Armstrong, uno de los pintores más prestigiosos de Estados Unidos y creador del estilo “Extensionalismo cósmico”. De Armstrong dijo el mismísimo Andy Warhol que era “el último mago del arte moderno que quedaba en los Estados Unidos”, tiene obras colgadas en los principales museos del mundo y sus pinturas se cotizan alrededor de los 2 millones de dólares.
Su actual propietario puso de nuevo la moto en el mercado en 2017 y desde entonces sigue en busca de un nuevo dueño. La buena noticia es que los especialistas en arte moderno aseguran que en la década que ha pasado desde que fue creada, el precio de la Cosmic Starship se ha revalorizado en el mercado del arte hasta superar fácilmente los 15 millones de dólares.
La moto, por otra parte, es perfectamente operativa y tiene toda la documentación perfectamente en regla para rodar legalmente por la carretera. Eso sí, asumiendo que alguna aseguradora quiera hacerse cargo del riesgo que supondría una caída.
“Medusa”, de Tarhan Telli
1.000.000 dólares
Los diseños barrocos y cargados de metales preciosos no son cosa solamente de los americanos. Resulta que también en Turquía son capaces de aunar ambos conceptos para crear una moto-joya única en el mundo. La Medusa -inspirada en el personaje mitológico- fue diseñada en Ankara por Tarhan Telli, de TT Custom Choppers, el preparador de motos más famoso del país.
Está realizada íntegramente -con chasis y caja de cambios incluida- en oro amarillo y blanco de 24 quilates y tiene un peso de 318 kilos. Telli explicó que, por una parte, con la presencia masiva de oro y plata quería rememorar el pasado del “cuerno de oro” y con el diseño pretendía que la estética de la máquina generara cierto desasogiego, como el que inspira la figura de Medusa, la dama cuya mirada convertía a los hombres en piedra.
El preparador turco empleó más de un año en construir este prototipo, que mecánicamente incorpora un motor V-twin de 1801 cc y 125 caballos de potencia.