A lo largo de las últimas semanas, se han producido varias reuniones de la Superbike Commission. De dichas sesiones han salido algunos cambios a largo plazo, y para ello la FIM, Dorna y la MSMA buscan definir algunos conceptos sobre la evolución del campeonato rumbo a una mayor concienciación en materia de medio ambiente y en el equilibrio y limitación de las prestaciones de las motos en pos de la seguridad.
La novedad más sonada es la implementación de un peso máximo de cara a 2024, pero hay muchas otras:
-Control de flujo de combustible: En 2025 será obligatorio un sistema de control de flujo de combustible. Para ello, en 2024 dos motos de cada fábrica llevarán un medidor de flujo que registre los datos en entreneamientos y carreras para definir los parámetros de cara al curso siguiente.
-Reducción del depósito: Para 2024 se reducirá la capacidad máxima del depósito de combustible, que pasará a ser de 21 litros.
-Sin cambios de rpm durante el año: Desde 2024 los límites de revoluciones por minuto se fijarán antes de empezar la temporada por acuerdo entre FIM, Dorna y MSMA; y no se reducirán durante el curso (salvo en caso de uso de superconcesión).
-Peso cigüeñal y eje de equilibrio: Ambos podrán modificarse el 20% más o menos del peso homologado medido durante la inspección de la FIM; y el kit de piezas correspondiente ha de incluirse entre las piezas elegibles de la FIM.
-Periodicidad del cálculo de tokens: Desde 2024, los puntos de control para realizar los cálculos de tokens de concesión serán cada dos eventos en lugar de tres.
-Aprobación del esquema de superconcesión: Se realizará un mes antes del evento, y la aprobación final detallada será 14 días antes del control técnico del evento. No habrá necesidad de describir las partes de superconcesión en el Reglamento FIM SBK, sino que se establecerá una comunicación específica en su lugar.
Fuente: motociclismo.es